jueves, 19 de enero de 2017

Reflexión sobre categorías políticas (2)

Fragmento del ensayo de Robert Spaemann SOBRE LA ONTOLOGIA DE «DERECHAS» E «IZQUIERDAS» Traducción del alemán: Juan Cruz Cruz

Cuestionamiento de la teleología

¿Cuáles fueron las razones que llevaron a dejar de lado las cuestiones causales orientadas teleológicamente? Es claro que las razones que llevaron a eliminar la perspectiva teleológica de la naturaleza no estaban suscitadas por los fenómenos. Sabemos hoy que los cambios de paradigmas nunca están forzados por los fenómenos mismos. Se trata de razones meta-científicas.

La constitución de la ciencia moderna encierra ella misma razones no-científicas. El camino que ha llevado a esto no puede ser indicado aquí. Hay un camino muy largo que va desde aquel conocimiento mentado por la palabra hebrea «jadah» * hasta el concepto cartesiano de «certa cognitio» **. «Yahvé conoce el camino de los justos», dice el salmo primero. «No os conozco», dice el Juez en el último día a los malos. «Adán conoció a su mujer y ella le dio un hijo». Franz von BAADER ha indicado, en fin, la conexión que hay entre conocimiento y comercio carnal. Conocimiento significa aquí unificación con otro, desaparición de la autoconciencia. Al final de este camino encontramos algo completamente opuesto: la cerrada claridad de la conciencia autosubsistente, para la cual se ha dado la naturaleza algo absolutamente extraño.

El estadio más importante en este camino fue la teología de la creación. Ella enseñó que la naturaleza no es algo último, como lo pensó toda la antigüedad: y preguntó todavía por su génesis. Esta génesis fue entendida como resultado de una acción. El arte se incrusta en la naturaleza, había dicho ARISTÓTELES. ¿Pero cómo penetra el arte en las cosas? ¿Cómo surge, por ejemplo, en el flautista? Respuesta: por el ejercicio. Y este ejercicio era la consecuencia de un paso dado de manera completamente intencionada y planeada. ¿Y cómo llega el arte a la naturaleza? También sólo por medio de un plan y una intención. Este era el argumento con el que el aristotelismo medieval conectó entre sí teleología y teología. La intención que dirige la flecha al blanco no está en la flecha, sino en el ballestero, escribe Tomás de AQUINO, utilizando la teleología natural como fundamento de una prueba de la existencia de Dios. Tomás ha entendido la analogía mutatis mutandis. *** El hacedor terreno sólo puede subordinar a su fin resultados puramente externos. El creador establece realmente en las cosas el «arte» teleológico.

Pero el ejemplo del ballestero se ha hecho famoso de modo paradójico. En la tardía Edad Media, con OCKHAM y BURIDAN, se arremetió contra la teleología: la finalidad sólo se halla en el obrar consciente. Si el fin de los procesos naturales se encuentra fuera de ellos, a saber, en la conciencia divina, entonces los procesos mismos sólo pueden ser tratados bajo un punto de vista causal. Podemos admirarnos del mundo como máquina del constructor divino; en ella misma podemos descubrir únicamente las mismas leyes mecánicas que él mismo ha utilizado. 


La teleología natural es fetichismo; la consideración mecánica de la naturaleza es vindicatio divini numinis, escribe el filósofo del Renacimiento STURMIUS. A esto se añade que para Francis BACON la teología es inútil. Si queremos hacer algo con la naturaleza, de nada nos sirve pensar si ella pretende algo por sí misma. Pues el conocimiento de la naturaleza se encuentra al servicio del hacer.

Representarse una cosa significa: «imagine what we can do with it, when we have it», escribe Thomas HOBBES. Por el contrario, la teología es conocimiento simpático, el intento de comprender la naturaleza a nuestra imagen y semejanza. Tal comprensión no estaba al servicio del hombre, sino que era un elemento de la autocomprensión del hombre en la totalidad del mundo. 

Estas preguntas ulteriores, de carácter teológico y práctico, volcadas sobre la naturaleza, significaban a la vez un distanciamiento. El hombre trasciende la naturaleza y conspira con el creador inmediatamente. Así se convierte la naturaleza en mero objeto de uso, de uti. La relación de entrega gozosa, frui, y por tanto, el conocimiento en el sentido arcaico, está reservada, según SAN AGUSTÍN, a la relación Dios-hombre.


YADAH (3034) H D Y El significado de Yadah es: Una acción voluntaria que expresa dependencia absoluta en Dios, extendiendo los brazos y levantando las manos, alabando al Señor.
(El antónimo de Yadah es: Exprimirse las manos en desesperación y angustia)
2 Cr.20:19; Salmo 63:4; 134:2; 1 Ti. 2:8. (http://credoproducciones.blogspot.com.es/2009/03/7-palabras-hebreas-que-se-traducen.html)
** certa cognitio: conocimiento cierto
*** mutatis mutandis: haciendo los cambios necesarios
**** vindicatio divini numinis: divina la venganza de la divinidad

Texto completo en: http://dadun.unav.edu/bitstream/10171/2196/1/05.%20R.%20SPAEMANN,%20Sobre%20la%20ontolog%C3%ADa%20de%20%C2%ABderechas%C2%BB%20e%20%C2%ABizquierdas%C2%BB.pdf

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